Desde la fila tres del patio de butacas
Por David Barbero | 11 febrero 2013 - 2:01 pm
Categoría: General

-Atreverse con ‘La voz humana’ de Jean Cocteau ya es digno de alabanza. Es un reto para valientes.
-Por la intensidad de las emociones que hay dentro y por las dificultades que acarrea su montaje.
-Ayer vi la versión hecha por la nueva compañía Moon Produkzioak en el Teatro Barakaldo, con la bailarina Meritxell Checa como protagonista bajo la dirección de Fer Montoya.
-¿Reiteras esa opinión positiva sobre ese montaje?
-Por supuesto. Además, comenzar la andadura de una compañía con esa obra es una declaración de principios.
-Es una buena idea, a mi juicio, añadir medios expresivos para comunicar las emociones y los sentimientos. Además de la palabra, los gestos, los movimientos de la danza contemporánea, la música, las iluminación, las imágenes proyectadas.
-Cuantos más elementos haya para reforzar la comunicación, mejor.
-¡No siempre es así!
-Los sentimientos principales de ‘La voz humana’ yo creo que son el abandono y la incomunicación. Son unas emociones muy profundas.
-Has dicho que acumular medios para comunicar los sentimientos es bueno. Pero añade retos. Hay que coordinar muy bien esos medios. Tienen que ir todos en la misma dirección. Deben sumar. Tienen que ir unidos. Si cada uno va por un lado, puede ser perjudicial. Se puede crear confusión o no comunicar nada.
-La danza contemporánea es muy traicionera a la hora de comunicar sentimientos concretos. Cada espectador puede entender o sentir una emoción diferente. Si se pone el énfasis en ese tipo de danza para definir, en una dirección, el carácter emocional de una pieza, se corren muchos riesgos.
-La palabra y la música funcionan mejor como comunicadores de emociones concretas.
-En este espectáculo, la palabra, que es lo fundamental en Cocteau, queda en segundo lugar.
-La protagonista es una bailarina. Esa era la elección. Si hubiera sido una actriz, la expresión del texto habría tenido más fuerza en la definición global del espectáculo.
-Otra decisión fue sacar a escena la presencia masculina. También pudo comunicar sensaciones encontradas.
-Es decir. ¡Asumir riesgos es de valientes!
-En el riesgo, está el arte. ¿No?

Esta entrada se escribio el Lunes, 11 febrero 11 2013 a las 14:01 pm. en la categoría: General. Puedes seguir los comentarios de esta entrada usando RSS 2.0 feed. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu pagina web.

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