Desde la fila tres del patio de butacas
Por David Barbero | 22 octubre 2021 - 11:18 pm
Categoría: General

David Barbero

-Confieso que he sido seguidor fiel de los espectáculos del grupo ‘Tricicle’. Creo que los vi todos. Incluso los primeros, cuando no eran tan famosos. Cuando yo hacía entrevistas en ETB, tuve largas conversaciones con ellos. En trío y por separado.
-Me ha interesado mucho su trabajo. No sólo los espectáculos protagonizados por ellos. Pero especialmente esas funciones. También su eficacia comunicativa en los gestos y movimientos. Su expresividad. Su humor. La compenetración entre ellos. Su profesionalidad.
-He seguido su actividad como creadores y productores de otros espectáculos. Muy variados. Desde ópera, a musicales, pasando por comedias, policiacos, y otros muchos géneros. Planteados siempre con mucho rigor, con análisis detenidos, gran meticulosidad y buenas dosis de imaginación.
-Me ha interesado especialmente su investigación -teórica, pero con aplicación práctica- sobre el mecanismo del gag en el humor. Sobre todo, la importancia del ritmo y el mecanismo de relojería que hay que aplicar a la conjunción de todos los elementos para lograr, en el momento preciso, el resultado cómico final.
-Hace ya un tiempo que están retirados de actuar en público en grupo. Todo parece que es definitivo. Se les echa de menos. Pero sus cerebros siguen funcionando, creando ideas y elaborando planes. Ahora para otros intérpretes.
-Todo esto viene a cuento de que esta tarde he estado viendo y disfrutando de un espectáculo unipersonal en el teatro Campos Elíseos de Bilbao titulado ‘Por fin solo’. Protagonizado en solitario por Carles Sans. Uno de los tres de Tricicle. El más alto, el de rasgos más marcados en el rostro.
-En definitiva, es un monólogo sobre el ‘Tricicle’. Anécdotas, curiosidades. Encuentros. Métodos. Complicidades. Bromas. Chistes. Por supuesto, es otra cosa. Predomina, casi en exclusiva la palabra. Dice que deseaba hablar. Pero se nota, para bien, el trabajo realizado en la comunicación gestual. También funciona el mecanismo de la conexión de cada elemento para lograr el estallido en el momento preciso.
-En la representación de esta tarde, he podido comprobar que continúa habiendo seguidores fieles de su trabajo. Por los aplausos y las risas, algunos mantienen la buena conexión. El público se ha mostrado satisfecho del reencuentro.
-No es que a Carles Sans se le de mal la comunicación verbal. Ni mucho menos. Además, la acompaña bien con gestos y movimientos. Pero yo mantengo la nostalgia de aquella eficacísima y divertida comunicación gestual. Porque realmente ahora es muy difícil encontrarla. Y en cambio, abundan mucho los monologuistas.

Esta entrada se escribio el Viernes, 22 octubre 22 2021 a las 23:18 pm. en la categoría: General. Puedes seguir los comentarios de esta entrada usando RSS 2.0 feed. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu pagina web.

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