David Barbero
-He tenido esta tarde especial interés en ver la pieza ‘Aprés vous, madame’ de Paula Comitre, dentro del festival internacional de danza contemporánea de Bilbao, Dantzaldia. Ha tenido lugar en el auditorium del Museo Guggenheim.
Ese interés se basaba en las numerosas referencias positivas sobre esta artista referidas a sus trabajos en la renovación del baile flamenco y también sobre sus cualidades interpretativas. Pero yo no tenía constancia personal y directa de todo eso. Así que he acudido a remediar esa ignorancia.
La pieza, con ese título atractivo en francés de ‘Aprés vous, madame’, es fruto del estudio, la investigación y el intercambio interdisciplinar que Paula Comitre ha desarrollado durante su estancia en la Citè des Arts de París. Además ella ha preparado una versión “desnuda’ y adaptada al escenario del Guggenheim, algo más reducido.
En su intención a la hora de crearla, esta pieza armoniza tradición y vanguardia, nutriéndose de otras disciplinas artísticas como la voz y el texto, así como de diferentes creadores del panorama europeo actual.
La música en directo la pone el piano contemporáneo del francés Orlando Bass, compositor de una música original y con características especiales, que mira al legado del repertorio español del primer tercio del siglo pasado entre los que figuran Falla, Albéniz o Granados.
Desde el mismo título de la pieza, ‘Detrás de Vd, señora’, existe y se manifiesta una destacada intención de revitalizar y homenajear la figura indiscutible de Antonia Mercé, La Argentina. Una legendacia artista, educadora y creadora de una escuela y estilo propio de danza, que desarrolló su arte en el primer tercio del siglo XX. Por eso, también las referencias a los compositores españoles de ese momento. Es también una de las impulsoras iniciales de la danza contemporánea. Sus peteneras o sus tanguillos son considerados como el punto de partida de esa renovación.
‘Après vous, madame’ se mueve por los caminos de la transversalidad entre las artes musicales, escénicas y plásticas. Plantea una propuesta artística en la que predomina el juego entre el espacio habitado y el vacío, entre la quietud y el movimiento. Un aspecto muy destacado es el cuidado por la estética, con el especial impacto del vestuario hinchable utilizado para conseguir una notable espectacularidad visual. Es una creación de María Alcaide. Sin descuidar tampoco la incidencia del asesoramiento de La ejecutora- Fran Pérez Román y Julio León Rocha.
En la interpretación y ejecución de la pieza es preciso señalar la muy especial compenetración y complicidad entre en compositor y ejecutor al piano, Orlando Bass, y la bailaora, directora y coreógrafa, Paula Comitre, que repercute mucho en el resultado.
Comencé el comentario reconociendo mi curiosidad inicial por conocer este trabajo artístico del que tenía referencias muy positivas. Una vez vez conocido, reconozco que ha merecido la pena. Y en muchos aspectos. Además reconozco que me ha resultado de gran utilidad la tertulia improvisada a la salida, bajo la lluvia, con auténticos expertos en esta materia y en esta pieza.