Desde la fila tres del patio de butacas
Por David Barbero | 10 septiembre 2022 - 11:37 pm
Categoría: General

David Barbero

-Durante la mini temporada teatral festiva de la Aste Nagusia de Bilbao, dejé ya constancia de mi asistencia al Palacio Euskalduna para ver el espectáculo musical ‘The Hole X’, un montaje para celebrar los diez años en que vienen presentándose las diferentes versiones sucesivas de esta pieza.

-En mi comentario teatral de ese día, también dejé constancia de mis dudas valorativas sobre lo visto y oído en tal espectáculo. No había encontrado una suficiente coordinación interna de los elementos. Me pareció una sucesión de números acrobáticos de notable interés, pero sin trama unificadora por parte de los textos introductorios. Echaba en falta el interés escénico de las intervenciones, muy potentes en cuando a sonido, pero quizá escasas de contenido y fuerza cómica. También aludía a un posible desfase de las pretendidas provocaciones, que han dejado de ser escandalosas durante estos diez años. La sociedad y el público ha evolucionado, mientras que el espectáculo ha quedado anclado en aquel momento. Añadía que, como consecuencia de todo eso, a mi juicio por supuesto, la pieza llegaba a parecer incluso larga.

-Con este preámbulo, puede resultar difícil de comprender que esta tarde haya acudido de nuevo al palacio Euskalduna de Bilbao para ver este espectáculo, del que conozco ya todas sus versiones. Explicaré en motivo.

-He acudido esta tarde de nuevo a ver de nuevo ‘The Hole X’ porque hoy, y también mañana, actúa como maestra de ceremonias, una mujer, una actriz, Eva Isanta. He pensado que ese detalle podía cambiar el espectáculo. Darle la vuelta. Superar lo que, al menos a mí, me habían parecido sus posibles ‘debilidades’ teatrales.

-Una vez visto de nuevo ‘The Hole X’, creo que la intervención de Eva Isanta como maestra de ceremonia lima unas cuantas aristas o posibles brusquedades innecesarias y ofrece una coordinación mayor. De todos modos, no he logrado despejar todas las dudas que he expuesto más arriba. Así que la culpa muy posiblemente sea mía.

-Recuerdo que, en mi primera visión de este espectáculo el día del estreno en el palacio Euskalduna, destaqué el entusiasmo y la sonoridad de los aplausos con los que los espectadores agradecieron el trabajo de los artistas, especialmente el de los protagonistas de los números acrobáticos.

-Debo decir que el público de esta tarde me ha parecido todavía más entregado, y que sus aplausos han sido más numerosos, más sonoros y más entusiastas, sobre todo los dedicados a los acróbatas.

-Ésta ha sido mi reflexión.

Esta entrada se escribio el Sábado, 10 septiembre 10 2022 a las 23:37 pm. en la categoría: General. Puedes seguir los comentarios de esta entrada usando RSS 2.0 feed. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu pagina web.

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