Desde la fila tres del patio de butacas
Por David Barbero | 4 septiembre 2008 - 10:14 am
Categoría: General

-¡Qué envidia! En todos los países, tienen algo que llevarse a la boca y nosotros, aquí en Euskadi, nada.

-¡La verdad que sí!

-Y el éxito que están teniendo en todos los sitios.

-En Estados Unidos, por ejemplo. Estaban ya todos aburridos discutiendo sobre si la señora Clinton tiene más capacidad o menos que el señor Obama para gobernar.

-De repente, llegan los conservadores con una sorpresa. Se sacan de la manga a una señora todavía de buen ver como candidata a la vicepresidencia. Y se inventan un lío familiar de embarazos prematrimoniales y rumores de hijos ocultos.

-¡Ha sido la bomba! Una vicepresidenta así es un tesoro. Un culebrón para todos los días.

-Eso no es nada con lo que ha pasado Francia.

-¡Hombre! Francia es mucha Francia. Siempre lo ha sido.

-La sorprendente aventura de la ministra embarazada.

-¡Soltera y embarazada!

-Además de guapa y elegante.

-La clave está en el misterio, en las incógnitas, en lo desconocido, en lo que se oculta.

-En no saber quién es el padre.

-¿Y cómo se ha metido Aznar en esta comedia de enredo?

-Él no se ha metido. ¡Le han metido!

-¡Seguro que está encantado de que se le atribuya el hijo!

-Hace tiempo que tiene pintas de querer hacer carrera como play-boy barato.

-Una ministra española también ha armado un pequeño lío con un bikini.

-¡No vas a comparar!

-¡Y nosotros, nada! ¡Seguimos jugándonos todos los días trágicamente la existencia o no existencia, la esencia, la consulta ….

-¡Qué envidia, de verdad!

Esta entrada se escribio el Jueves, 4 septiembre 4 2008 a las 10:14 am. en la categoría: General. Puedes seguir los comentarios de esta entrada usando RSS 2.0 feed. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu pagina web.

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