-Estoy leyendo con gran atención la serie de artículos que está publicando el veterano escritor, sobre todo dramaturgo, Alfonso Sastre.
-Yo no necesito leer sus artículos, para saber lo que dice.
-Como tengo poco tiempo, debo seleccionar mis lecturas. Alfonso Sastre no está entre mis prioridades.
-A mí, es que no me interesa.
-Yo lo leo no sólo con interés sino también con respeto.
-Es que eres amiguete suyo.
-Me parece un acierto el título de su serie, dando la vuelta al dicho clásico. ‘Si vis pacem, para pacem’
-En cristiano, por favor.
-¡Pero si es latín!
-La propuesta de Alfonso es ‘Si quieres la paz, prepara la paz’.
-El dicho clásico decía: ‘Si vis pacem, para belum.’ Si quieres la paz, prepara la guerra’.
-En el segundo artículo de la serie, Alfonso defiende que no es necesario u obligatorio condenar la violencia de ETA y sus acciones terroristas.
-Argumenta que para lograr una negociación que resuelva el conflicto vasco, no se puede comenzar ‘llamando asesinos a los virtuales interlocutores, ni exigiéndoles que se pongan de rodillas y que besen las suelas de los zapatos de quienes los convocan’
-¿Tú estás de acuerdo con eso?
-He dicho que leo con atención y respeto lo que escribe Alfonso Sastre. No he dicho que esté de acuerdo.
-¡Menos mal!
-De ninguna manera, se puede pretender que esa virtual negociación, en el caso en que se diera, sea de igual a igual.
-Si queremos entendernos, debemos respetar las leyes
-¿Quién ha elegido a los miembros de ETA como representantes del pueblo vasco?
-Hay quien los apoya con sus votos.
-En todo caso, muy minoritario.
-Yo discrepo totalmente con Alfonso. Lo siento. La violencia, el asesinato y el terror no están en la mesa de negociación. Puede estar la independencia. Pero el asesinato, no. La violencia debe ser condenada y eliminada antes.
-¡De modo inmediato! Tolerancia cero con la violencia.
-Dialogar pacíficamente puede acercar la paz.
-¡Según Sastre!.