Desde la fila tres del patio de butacas
Por David Barbero | 11 marzo 2009 - 11:15 am
Categoría: Política

-Me ha chocado ver a un líder espiritual como es el Dalai Lama reivindicando una cosa tan material como es la independencia del Tibet.

-La independencia de un país no es nada material.

-Lo que quiero decir es que un líder espiritual no debe entrometerse en cosas tan de la tierra como son las reivindicaciones políticas.

-Yo te insisto en que los sentimientos están en la base de toda reclamación de independencia.

-Pues yo insito en que un líder espiritual tan elevado como debería ser un Dalia Lama, con toda la mística budista que lleva, debe estar por encima de esas… de esas…

-Atrévete a decirlo. De esas miserias.

-He visto fotografías de metralletas y otras armas con las que los tibetanos defienden lo que llaman su derecho a la independencia.

-La independencia de cada persona está en su corazón, muy por encima de que existan unos papeles que digan que un territorio es independiente de otro.

-Creo que no estáis profundizando lo suficiente sobre el sentimiento nacionalista y lo que eso significa para algunas personas.

-Para mí las reivindicaciones políticas son rastreras siempre y en todos los sitios.

-La alineación de los sentimientos patrios llega a envenenar incluso los corazones y las mentes más ilustres.

-Me parece que estamos ya instalados en los cerros de Úbeda.

-Quien quiera sentirse tibetano que lo sea. Quien prefiera ser chino, lo mismo.

-Pero que la paz budista reine en todos los corazones.

-Amén.

Esta entrada se escribio el Miércoles, 11 marzo 11 2009 a las 11:15 am. en la categoría: Política. Puedes seguir los comentarios de esta entrada usando RSS 2.0 feed. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu pagina web.

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