-Es curioso. Antes, pasaba lo contrario. Eran las obras de teatro las que se adaptaban al cine.
-También sucede eso alguna vez.
-Yo ayer estuve viendo la adaptación al teatro de la película clásica ‘39 escalones’
-No sé yo valorar ese cambio. ¿Significa que el teatro ha retrocedido y que el punto de referencia es el cine?
-Sí. Quizá signifique eso. ¿No?
-Y ¿qué tal estuvo?
-El ritmo del cine, tan rápido, con el cambio de una situación a otra, sin necesidad de los protocolos de los escenarios y las ataduras del teatro, viene bien. Se agradece.
-Es que el modo de narrar del teatro es muy lento. Pertenece a otro siglo.
-En este caso, la obra, que en el cine es más de intriga, aquí se pasa a poner el énfasis en el punto cómico. A veces, es un humor un poco exagerado.
-¿Lo recomiendas?
-El teatro casi siempre es recomendable.
-Al público le gustó mucho. Se rió y aplaudió.
-Entonces, me fiaré más del público que de las pegas que tú pones.
-Me parece muy acertado.
Esta entrada se escribio el Miércoles, 2 septiembre 2 2009 a las 9:52 am. en la categoría: Teatro. Puedes seguir los comentarios de esta entrada usando RSS 2.0 feed. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu pagina web.