Desde la fila tres del patio de butacas
Por David Barbero | 4 noviembre 2020 - 12:24 am
Categoría: General

David Barbero
-A veces, me gusta imaginarme las obras que voy a ver mientras camino hacia el teatro. Es como vivir las piezas varias veces. En ocasiones, coincido con lo que veo después. Otras, no tiene ninguna relación. Y asisto a dos funciones diferentes.
-Esta tarde, lo he practicado, cuando he ido al teatro Arriaga a ver ‘Be Gog Is’. La compañía responsable es la catalana ‘Spai dual’. La integran Oriol Pla, Blai Juanet Sanagustín y Marc Sastre. Tres intérpretes totales.
-Mientras chispeaba, cuando iba, me he imaginado un show divertido, ingenioso. Con mucho humor. Más música. Gestos y movimientos acrobáticos. Contorsiones imposibles. Virtuosismo en las canciones. Armonía en las voces. Ninguna, casi, palabra. Mucha imaginación. Picardía. Complicidad. Extraordinario ritmo. Inteligente intención cómica. Mucha sutiliza.
-Ya sentado en la butaca, tras los trámites y precauciones higiénicas, he comprobado que ‘Bi Gog Is’ contiene todo eso. Y lo eleva a una potencia cualificada. No te puedes perder detalle. En cada momento, tienes varios alicientes para la vista y en oído. Los movimientos y los gestos te sorprenden. Y sin poder reponerte, ya te ha llamado la atención un sonido inesperado. Otra intención. Una sugerencia más.
-Se ve que cada elemento ha sido estudiado, trabajado y perfeccionado. Pero el conjunto ha estado más milimetrado todavía. Y no digamos las luces. Los efectos sonoros y los visuales parecen imposibles. Los juegos con el humo, con el cigarro, con las sillas, o sin nada, no dejan que apartes la mirada.
-Todo sucede de modo tan espontáneo, vivo y divertido que comienzas a pensar que lo perfecto es el caos. Inmediatamente, te das cuenta de que para lograr esa perfección de apariencia caótica, hay que tener mucho talento, gran preparación y una generosa entrega en trabajo y disciplina.
-Al terminar el espectáculo, su complicidad y generosidad te van añadiendo bises magistrales. Deseas que la sesión continúe con pildoritas maravillosamente espontáneas, magníficamente ideadas, muy bien preparadas y ejecutadas con gran esmero.
-Así que cuando he vuelto a casa, ya entre la lluvia, he ido recreándome, por tercera vez, en el espectáculo visto. Era imposible engrandecerlo ni con imaginación. Oriol Pla, Blai Juanet Sanagustín y Marc Sastre lo había hecho todo de modo inmejorable.
-Sólo quedaba quitarse el sombrero, como ellos lo hacen en el espectáculo, pero en su honor.

Esta entrada se escribio el Miércoles, 4 noviembre 4 2020 a las 0:24 am. en la categoría: General. Puedes seguir los comentarios de esta entrada usando RSS 2.0 feed. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu pagina web.

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