-No se te ocurra poner un pero a las obras del divino William Shakespeare.
-Bueno. Tendré en cuanta esa advertencia.
-Las obras del clásico inglés son maravillosas, extraordinarias. En ellas se encuentra todo. Allí están los más profundos los sentimientos humanos, la sabiduría ….
-Y de la forma poética, no digamos nada. Lo mejor de lo mejor. Sus versos, su métrica, su lenguaje.
-Con ser eso tan perfecto, lo mejor de todo son los personajes. Qué tipos, que caracteres. Tanto los masculinos como los femeninos.
-Que a mí, también me gusta.
-Hay muchos que dicen que les gusta mucho Shakespeare y cuando dirigen sus obras, las deforman tanto, que no hay quien las reconozca.
-¡Para mal!
-Eso se hace con muchos autores.
-Tú querías decir algo. ¿No?
-Estuve viendo el otro día ‘Sueño de una noche de verano’ en la nueva versión de Ur Teatro.
-Esos son expertos en Shakespeare.
-Lo que yo quería decir, si me dais permiso, es que en esa obra, la parte de la pieza representada por los cómicos dentro de ella, me parece que puede ……
-Eso es que los de Ur no aciertan en el tono. Lo que hacen es una exageración.
-Bueno. Yo diría que igual sobra, si me dais vuestro permiso para decirlo y con perdón.