DAVID BARBERO
-No creáis que sólo lo hago yo. Hay muchos seguidores fieles que también lo tienen como costumbre arraigada. Cuando llega la inimitable compañía La zaranda, lo dejan todo. Se ponen un vestido adecuado al acontecimiento y allí se presentan. No es necesario que sea un estreno. Lo que hacen estos inconfundibles artistas siempre es nuevo, gratificante, enriquecedor, contagiante. Algo digno de ver, disfrutar y saborear.
-Por estos lares, al escenario al que suelen acudir los emblemáticos integrantes de este veteranísimo, singular e irrepetible grupo, suele ser el Teatro Barakaldo. Allí es donde hemos acudido, otra vez esta tarde, los fieles, los seguidores inquebrantables. Sin necesidad de pasar lista, sabemos que estamos allí. Si no, algo muy grave ha tenido que suceder.
-Allí nos hemos encontrado con su nueva propuesta titulada esta vez ‘Manual para armar un sueño’. Ese sueño, esta vez, ha estado concretado, o simbolizado, en el teatro mismo, en las artes escénicas o quizá en el arte en general. Encarnado en unos actores, o quizá deban calificarse de artistas integrales, posicionados frente a un espejo, en el que se ven envejecer, o quizá perdurar, entre las muchas miserias y alguna posible grandeza, con el olvido o desprecio de los de siempre, es decir de los que mandan.
-En el fondo de ese espejo, como en la vida misma, encuentran o por l menos algunos buscan la aparente realidad. La falsa fama, la utilización, bastante estupidez, algo de inteligencia, adulación interesada, La ilusión de un éxito de taquilla y el oscuro peligro de la utilización interesada.
-Ellos, y nosotros a su lado, continuamos en las tinieblas, buscando la luz, intentando vislumbrar el destino, percibiendo a veces el sentido del viento, llenos en casi todas las ocasiones de escepticismo, pero manteniendo a pesar de todo, la esperanza y la cabeza alta.
-Como siempre el texto ha sido escrito por Eusebio Calonge. La
dirección escénica la sigue firmando Paco de la Zaranda. Sobre el escenario, se mantienen Francisco Sánchez, Gastar Campuzano y Enrique Bustos. Ellos son la compañía inestable, pero firme como siempre, procedente de ninguna parte, incluida Andalucía la baja, y con el destino igual de abierto pero incierto. Como sucede desde el, lejano y próximo, año 78 del siglo pasado, cuando comenzaron.
-A la salida del teatro Barakaldo, otra vez, nos hemos mirado los fieles de reojo, aunque no era necesario. Somos sabedores de que, dentro de algún tiempo, volveremos a acudir de la misma manera, a otra cita similar. Tenemos la seguridad de que, a pesar de todo, siempre nos quedará La Zaranda.
Esta entrada se escribio el Domingo, 24 marzo 24 2024 a las 0:41 am. en la categoría: General. Puedes seguir los comentarios de esta entrada usando RSS 2.0 feed. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu pagina web.