DAVID BARBERO
-Esta tarde, antes de salir de casa, me he puesto una camisa recién planchada. También he elegido un pantalón con la raya muy recta. Incluso he pasado el cepillo a los zapatos. Después, os digo porqué lo he hecho.-
-He acudido, casi con devoción, al teatro campos Elíseos de Bilbao para ver al veterano y entrañable actor Hector Alterio en su interpretación de la pieza ‘Una pequeña historia’ escrita y dirigida por su compañera Ángela Bacaicoa.
-He señalado que he acudido ‘con devoción’, ya que a juicio de muchos, este proyecto se ha preparado en familia como despedida de su larga y muy exitosa actividad interpretativa, que ha durado nada menos que siete décadas.
-El espectáculo se ha construido sobre la base de sus recuerdos, de hechos significativos de su vida. Como un viaje de ida y vuelta, Buenos Aires – Madrid – Buenos Aires, Héctor Alterio nos ha interpretado, especial emoción, también sus preferencias en poesía y música.
-De acuerdo con su compañera vital, lo presenta entre el amor y el humor. Como una noche de goce con todos los sentidos. El veterano actor nos ha llevado de la mano, con su voz inconfundible, con su expresividad y con su sensibilidad. Lo he hecho con gran nostalgia, con su natural comunicación, con cadencia, con el ritmo exacto, a pesar de las limitaciones por su edad.
-Con la dramaturgia de Ángela Bacaicoa, la compañera de vida de Alterio, y acompañado por el pianista Juan Esteban Cuacci, ha relatado cómo con cuarenta años, en 1974, se tuvo que abandonar su Argentina natal y venir a España para presentar la película ‘La Tregua’ y cuando quiso volver, ya no había aviones ni permisos ni seguridad de regreso para él. ‘Fue así como Madrid resultó ser mi cárcel y mi salvación’.
-En ese momento de su vida tuvo que acomodarse a otros escenarios y cambiar su acento, enfrentándose al dolor del exilio. Casi como un sostén en esos años, se dejó conmover por los poemas de León Felipe, que como él era un hombre de teatro y exiliado político. Se convirtió en un trovador, recorriendo el país, recitando estos versos del español que también hizo suyos, interpretando teatro, participando en el cine, reconstruyendo su vida, unas veces con alegría y otras con nostalgia.
-En el espectáculo, Héctor recita y hasta canta tangos, pone emoción a la poesía en la que fue tallado desde niño, y va hilvanando la emoción de todos estos años entre León Felipe, Borges, Catulo Castillo, Piazzolla, Horacio Ferrer, Hamlet Lima Quintana y Eladia Blázquez.
-Creo que no es necesario ya que lo de la camisa planchada, el pantalón de raya recta y el brillo de mis zapatos ha sido una pequeña muestra de reconocimiento por su trabajo, su coherencia y su sensibilidad. De esa manera me he unido al aplauso, prolongado y muy sentido, de los asistentes como agradecimiento, como admiración y como despedida artística.
Esta entrada se escribio el Sábado, 23 noviembre 23 2024 a las 0:59 am. en la categoría: General. Puedes seguir los comentarios de esta entrada usando RSS 2.0 feed. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu pagina web.