-¿Disfrutarías ayer viendo en directo la interpretación teatral de John Malkovich en ‘The infernal Comedy’.
-No solo en directo. Al lado. Tenia mi asiento en el palco sobre el mismo escenario del Teatro Arriaga de Bilbao. Cuando se acercaba a la parte izquierda del escenario le podía tocar con la mano.
-¿Cómo se ven desde tan cerca las virtudes y los defectos?
-Encontré más virtudes que defectos. Me pareció un actor seguro de sí mismo y de lo que tenía que hacer.
-La interpretación fue en inglés. ¿No?
-El espectáculo estaba catalogado como musical. Pero era un espectáculo complejo. Intervenía una orquesta, dos sobranos y Malkovich. El no canta. Sólo actúa.
-Te preguntaba sobre el inglés.
-En ese momento, maldije mi pereza, por no haber prendido más en mi estancia en Irlanda del Norte. No comprendí los matices de al obra, como hubiera querido.
-Me pareció curioso el planteamiento. Es la presentación de un libro autobiográfico de un asesino en serie, ya fallecido que trata de explicar su caso y la motivación de sus delitos a la vez que ejemplifica los asesinatos matando a las sopranos que intervienen en el espectáculo.
-Habrás tomado nota de la fórmula. ¿No?
-Desde luego. Me pareció curiosa.
Esta entrada se escribio el Miércoles, 19 mayo 19 2010 a las 16:40 pm. en la categoría: Teatro. Puedes seguir los comentarios de esta entrada usando RSS 2.0 feed. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu pagina web.